Volar una cometa puede ser un divertimiento tanto para niños como para adultos. Desde que empezaron a usarse en China como marca en operaciones militares, han evolucionado mucho. Incluso existen competiciones de lucha y combate de cometas. De ahí que en el mercado puedan encontrarse diferentes tipos de cometas. Y no todas sirven para cualquier propósito o edad por eso es recomendable saber cómo elegir una cometa.
Para elegir una cometa perfecto hay que fijarse en la edad de quien la manejará, la edad, la destreza y de la fortaleza física del que vaya a volarla. Las cometas, esos chismes voladores, pueden clasificarse en tres tipos:
- Cometas estáticas: Son las más fáciles de volar y la mayoría de modelos están pensados para su uso por niños. Aunque también existen modelos gigantes reservados a expertos y forzudos.
- Cometas acrobáticas: Con forma de delta, requieren destreza para poder crear las figuras y espectaculares acrobacias posibles.
- Cometas de tracción: Más parecidas en forma a un parapente, requieren estar en buena forma. Normalmente son grandes y pueden incluso arrastrar a quien las maneja. Este tipo se emplea en actividades deportivas como el kitesurfing.