A Michael Jeffrey Jordan, para muchos el mejor jugador de baloncesto de todos los tiempos, le hubiera gustado compartir vestuario con Jerry West, un escolta que destacó en los años 60 y 70 defendiendo la camiseta de Los Ángeles Lakers, y cuya silueta sirvió de inspiración a Alan Siegel para crear el popular logotipo de la NBA.
Jerome ‘Jerry’ Alan West nació en 1938 en Chelyan, West Virginia, y, entre otros triunfos importantes como jugador -también entrenó-, consiguió un campeonato de la NCAA con la Universidad de West Virginia en 1959 -siendo MVP de la final-, un oro olímpico con la selección de EEUU en Roma, en 1960, e incluso un anillo de la NBA con los Lakers en 1972.
Sobre Jordan, poco se puede decir que no se sepa ya. Su impecable trayectoria está llena de títulos y en sus vitrinas apenas hay espacio para tantos y tantos reconocimientos: seis anillos NBA con los Chicago Bulls, diez títulos como máximo anotador de la competición, cinco MVP de la temporada, seis MVP en las finales, líder en robos de balón durante tres temporadas, mejor defensor en otra,…
‘Air’ Jordan promedió ni más ni menos que 30,1 puntos por partido en su carrera, grabando a fuego algunos de sus récords en la mente de los aficionados al basket: 5.762 puntos anotados en playoffs, 21,3 puntos de media durante sus participaciones como All Star, 69 puntos en un partido disputado ante Cleveland en el año 1990,…
¿Algunas curiosidades más sobre Michael Jordan? Ningún miembro de su familia mide más de 1,80 centímetros, le gusta el jazz, se hospeda en los hoteles con alta temperatura para evitar enfermedades y lleva tatuado el símbolo omega en el pecho.
SIEMPRE MJ23 SERA EL MOJR
Increible, Jordan. Aún recuerdo esos concursos de mates en los que volaba. Por ejemplo, aquel duelo con Dominique Wilkins en 1988.