Empleamos la expresión ‘dormirse en los laureles’ como sinónimo de abandonarse, dejarse, relajarse o descuidarse en una actividad, previamente iniciada, cuyos resultados ya satisfacen y/o generan confianza de éxito. Se trata de un dicho muy popular en los ámbitos educativo, laboral o deportivo, entre otros, pero ¿cuál es su origen?
‘Dormirse en los laureles’ procede de la época en la que a emperadores, generales y personajes populares de la cultura se les coronaba con guirnaldas de laurel para reconocerles públicamente algunos logros importantes. Alcanzado el éxito, muchos de ellos no volvían a esforzarse más; es decir, se dormían en los laureles.
Las coronas de laureles se hicieron especialmente famosas en la época del Imperio Romano y se han mantenido como sinónimo de victoria hasta nuestros días. En algunos lugares tienen connotaciones de tipo bélico y otras relacionadas con la libertad.
Países como Argentina y Colombia portan coronas de laurel en sus escudos, y también las lucen con orgullo en sus logotipos compañías como Alfa Romeo y organizaciones como la ONU.
no lo entiendo