Ubicado en Europa central, Eslovenia es uno de los países más pequeños del continente, lo que no le impide hacer frontera con hasta cuatro naciones más: Italia, Croacia, Hungría y Austria. Baña su costa suroeste el mar Adriático y, a pesar de sus pequeñas dimensiones, concentra numerosos atractivos. ¿Por qué viajar a Eslovenia?
Para empezar, Eslovenia cuenta con ciudades de auténtico cuento. Es el caso de su capital, Ljubljana, cuya parte vieja encierra paseos de lo más embaucador; pero también de otras como Maribor, la segunda más grande del país, y de las bellas Koper, Izola y Piran, por citar sólo algunos ejemplos.
Si lo que te va es la aventura, en Eslovenia encontrarás auténticos parajes de ensueño para realizar actividades como el ciclismo, el senderismo,la espeleología, el esquí o el rafting. No te pierdas los impresionantes paisajes alpinos, y te recomendamos que experimentes además en el Parque Nacional Trigalv, el río So?a, Sava y Savinja, las grutas de Postojna y la cueva de Škocjanske.
Por su peculiar orografía, resulta especialmente excitante en Eslovenia pasear en globo o hacer paracaidismo. Pero mejor aún es su proximidad con los encantos foráneos. En poco más de dos horas podrás visitar la emblemática Viena, disfrutar de las famosas playas croatas o realizar un interesante recorrido por la histórica Italia.