¿Crees que tú mascota podría estar deprimida?

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Imagen de Suna Onne en Unsplash

¿Tu mascota parece triste? ¿Ha perdido interés por el juego y ha reducido el nivel de actividad? ¿Se pasa el rato durmiendo?

Si has respondido afirmativamente a alguna de estas tres preguntas, es posible que tu mascota sufra depresión. Aunque la información disponible en este ámbito es limitada, existen múltiples evidencias que demuestran que las mascotas también pueden sentirse tristes y deprimidas.

La depresión es una enfermedad mental muy habitual en seres humanos. De hecho, la Organización Mundial de la Salud estima que el 5 % de los adultos sufren algún tipo de depresión. Esta enfermedad puede darse por varios motivos, como la falta de sueño, una mala dieta, una experiencia traumática, el consumo de drogas o alcohol e incluso problemas como la ludopatía.

Aunque las mascotas no experimentan los síntomas asociados a la depresión clínica en seres humanos, se cree que pueden sentirla en forma de tristeza, pena y aflicción.

Síntomas de depresión habituales en mascotas

Aunque no podemos preguntarles cómo se sienten, sí podemos reconocer ciertos síntomas que nos indicarían que pueden estar sufriendo. Como no hay nadie que conozca mejor a tu mascota, tú eres la persona más indicada para apreciar cualquier cambio de comportamiento o para identificar cualquier indicio de tristeza en ella.

Los síntomas siguientes podrían indicarnos que una mascota se siente deprimida:

– Duerme más de lo habitual o se muestra letárgica

– Ha perdido interés en las actividades de juego habituales o ha reducido el nivel de actividad

– Tiene menos apetito

– Se muestra esquiva o evita las situaciones sociales

– Se lame las patas

– Interactúa menos con sus dueños (y con otros animales) o, al contrario, les pide más afecto (se muestra más dependiente)

– Ladra o aúlla más de lo habitual

– Tiene un comportamiento agresivo fuera de lo normal o se muestra más destructiva

– Frecuenta zonas de la casa en las que un miembro del hogar que ya no está pasaba la mayoría del tiempo

– Vuelve a hacer sus necesidades en casa

Causas de depresión en mascotas

Después de reconocer que tu mascota está deprimida, toca averiguar por qué se siente así.

Pena

Puede que las mascotas no tengan la misma capacidad de raciocinio que los seres humanos, pero igualmente sienten y perciben la pérdida de alguien querido. Es normal que sientan pena por el fallecimiento de otra mascota de la casa o de alguno de sus dueños, así como por la marcha de algún miembro del hogar (tras una separación o porque un hijo se ha ido a vivir por su cuenta).

Cambios en el entorno

Cambiar de hogar, remodelar la casa o introducir cambios importantes (como la llegada de un bebé) puede afectar a las mascotas y causarles una depresión. La introducción de una nueva mascota en la familia también puede resultar una experiencia estresante y provocar cierta tristeza. A menudo, las mascotas necesitan tiempo para aclimatarse a estos cambios y pueden mostrarse deprimidas hasta que lo consiguen.

Los dueños

Las mascotas son muy intuitivas y saben reconocer el estado de ánimo de sus dueños. Por lo tanto, si tú te sientes triste, es posible que tu mascota también se sienta triste por pura empatía.

Aburrimiento

Otra causa de depresión posible es el aburrimiento, quizá debido a la soledad o a la falta de estimulación. Ello puede provocar que se vuelvan tímidas e introvertidas.

Qué hacer si tu mascota se siente deprimida

Si crees que tu mascota podría estar deprimida, lo primero que debes hacer es llevarla al veterinario. Los problemas de comportamiento suelen tener su origen en problemas médicos o físicos, por lo que es necesario que un especialista le eche un vistazo para descartar cualquier otra enfermedad.

Si tu mascota está deprimida, hay muchas cosas que puedes hacer para ayudarla. En primer lugar, evita cualquier actividad o lugar que pueda aumentar su nivel de ansiedad. Igual que a las personas, a las mascotas les gusta la rutina, por lo que resulta recomendable mantener un horario establecido para reducir la ansiedad y ayudarles a superar esta etapa. Para ello, basta con establecer los paseos, las comidas y los juegos a la misma hora cada día.

La actividad es también muy importante: proponle los juegos que sabes que le gustan, cómprale un juguete nuevo o pasea por algún lugar nuevo. Y no te olvides de interactuar regularmente con ellas, sobre todo acariciándolas y dándoles cariño.

Varios expertos creen que ofrecer una mayor estimulación a las mascotas, quizá mediante ejercicios mentales, puede ayudarles a sentirse mejor. Practica con ellas nuevos trucos y ofréceles algún premio especial para despertar su interés.

Ahora bien, si el estado de tu mascota es preocupante, es importante que acudas al veterinario lo antes posible.

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