Kobe, una ciudad portuaria localizada en la isla japonesa de Honshu, es célebre por un tipo de carne, también denominada kobe, que se produce exclusivamente en este lugar del mundo. Mayoritariamente de buey, pero también de vaca o de ternera, la carne de Kobe es una de las más apreciadas y caras del mundo.
La carne de Kobe se caracteriza por su ausencia de grasa, su fina textura y su gran veteado, que aporta extraordinaria suavidad a la carne. Pero lo verdaderamente curioso de la carne kobe es la razón de su extraordinaria calidad, basada según los expertos en los mimos y cuidados que reciben los animales antes de ser sacrificados.
En las granjas de Kobe, los animales disfrutan de un confort inusitado. Música clásica para crear un ambiente relajado, masajes diarios para lograr un buen tono muscular, baños de sake y una dieta que incluye cerveza, para estimular el apetito de los animales y disminuir la presencia de grasa de la carne. Se vende a precios que rondan los 200 y 300 euros por kilogramo y requiere una autentificación de calidad basada en el índice de masa corporal del animal.