Steve Jobs fue un informático y empresario estadounidense, toda una influencia en el sector y uno de los principales culpables de la escalada tecnológica que hoy vive el mundo actual. Padre del primer ordenador personal, sus ideas visionarias revolucionaron los mercados y los hábitos de millones de personas durante varias décadas.
Los orígenes de un genio
Nació en San Francisco en febrero de 1955 y como sus padres eran estudiantes y no estaban casados fue dado en adopción unas semanas después. Fue adoptado por Paul y Clara Jobs, que residían en la ciudad californiana de Mountain View, una ciudad rural que se convirtió en sede de la hoy conocida Silicon Valley.
Al terminar el bachiller, Steve Jobs abandonó pronto el estudio universitario desencantado por el sistema educativo. Interesado en la filosofía, ahorró y viajó a la India buscando iluminación espiritual y a su vuelta fue contratado como diseñador por la industria de videojuegos Atari.
Apple, una historia de idas y venidas
No se puede hablar de Apple sin que venga a la memoria la figura de Steve Jobs. Allá por el año 1975 creó, en el garaje de su casa y junto a su amigo de la infancia Steve Wozniak, la compañía Apple Computer Inc. Comenzaron realizando ordenadores a mano en la casa de sus padres, pero en pocos años la empresa dio un salto enorme para situarse rápidamente en el Fortune 500. El de Apple fue el ascenso más rápido de una compañía en la historia empresarial. 
Sin embargo, diez años después de su fundación el difícil carácter de Jobs provocó que la relación entre ambos amigos empeorara. El resultado fue que Wozniak se marchó de la empresa y al tiempo Jobs hizo lo mismo para emprender una aventura en solitario. Así, Steve Jobs se convirtió en el director ejecutivo de Pixar, una compañía que él mismo fundó. Revolucionó la industria de animación con películas como ‘Toy Story’, el primer largometraje generado completamente por ordenador y que consiguió ser el mayor éxito en taquilla en 1995 obteniendo un premio Óscar.
Poco después volvió a Apple y reorganizó la compañía trabajando en nuevos equipos. Creó el iMac, los portátiles iBook y el reproductor iPod. Pero fue en 2007 cuando realmente rompió el mercado con el teléfono iPhone y la tableta iPad. Para muchos, Apple ya ha dejado de ser una compañía tecnológica y se ha convertido en una manera de ver la vida.
Muerte de Steve Jobs
A mediados del año 2004 comunicó a sus empleados que tenía un tumor canceroso en el páncreas, pero el deterioro de su salud no logró reducir su entrega en el trabajo y su afán innovador. Delegó la mayor parte de sus responsabilidades en Timothy Cook (actual director ejecutivo de Apple) al someterse a un trasplante de hígado como consecuencia del cáncer y finalmente falleció el 5 de octubre de 2011 a los 56 años de edad.
La polémica llegaría después, ya que su biógrafo oficial explicó que el empresario rechazó operarse durante 9 meses y en lugar de optar por el tratamiento médico recomendado decidió optar por terapias alternativas para curar el cáncer. Su médico afirmó que de haberle hecho caso podría haber sobrevivido porque “tenía unos tumores relativamente severos con una tasa de supervivencia durante más de una década del 100%”.