Conocida en la antigüedad como Mesopotamia, La República de Irak es un país del suroeste asiático limítrofe con Jordania al oeste, Siria al noroeste, Turquía al norte, Irán al este y Kuwait y Arabia Saudita al sur. Reconocible por emplazamientos geográficos como los ríos Tigris y Eufrates, además de por la cadena montañosa Zagros, los historiadores la consideran ‘cuna de la civilización’, donde nació la escritura. Tras haberse convertido en centro constante de conflictos internacionales, Irak trata en la actualidad de levantarse como democracia parlamentaria, aunque sigue ocupada, en parte, por la coalición multinacional de Reino Unido y EEUU. ¿Cuál es la capital de Irak?
Bagdad es la capital y ciudad más grande del país, con 2.260,2 km². De este modo, 7,216,040 de bagdadies la convierten en una de las metropolis más pobladas de todo Oriente Medio, después de El Cairo y Teherán. Ubicada junto al río Tigris, y por lo tanto mejor provista de agua y recursos naturales que otras ciudades de la zona, su importancia histórica es innegable.
Su fundación se remonta al año 762 antes de cristo, cuando el Califa Al-Mansur la construyó para convertirla en capital del Islam. Desde entonces, se convirtió en centro cultural y de aprendizaje, donde destacaba la biblioteca Casa de la sabiduría. Muchos de los relatos de ‘Las mil y una noches’, por ejemplo, estaban situados en sus calles. Las guerras del Golfo moderna, sin embargo, han despojado a la ciudad de gran parte del patrimonio cultural más antiguo, pese a que el Museo Nacional de Irak todavía conserva algún tesoro. La Torre de Bagdad, actualmente Centro de Telecomunicaciones Ma’amoon, es, por su parte, el punto más alto de la urbe.
Administrativamente, Bagdad está separado en 89 barrios oficiales dentro de 9 distritos, que eliguen representantes y miembros de los consejos. Asimismo, en la actualidad, todos los aspectos de su vida diaria sobrellevan una profunda reforma y reconstrucción, desde que la caída del dictador Saddam Hussein pusiera al país en una encrucijada.